Encuentro del primer tipo

Fue un sábado. Salí al patio de mi casa, después de horas de escuchar Daft Punk y tomar fernet con Coca Zero...necesitaba un poco de aire. Amanecía. Mi amigo Juan sacó su telescopio y se dedicó a la tarea de buscar a Saturno, un planeta difìcil de encontrar. Yo me puse a observar dos estrellitas, una roja y otra común y corriente. En eso veo que pasa una luz parecida a una estrella pero más chiquita. Su camino era irregular y mi amigo no pudo verla. Desapareció ante mis ojos. Pero lo que sea que haya sido, me dejó un mensaje por vía telepática:
"Sì, me viste. Pero nadie te va a creer porque escuchaste Daft Punk y tomaste fernet toda la noche. Te van a decir que no era nada más que un satélite. Nos encanta burlarnos de ustedes. Los del planeta Tierra son tan egocéntricos e ingenuos...".
En ese momento supe que nuestro planeta se encuentra en un tramo de una vía (¿la vía Lactea?) por la cual circulan las 24 horas miles de ovnis y seres extraños que ni siquiera nos imaginamos (Alguien dijo alguna vez que sólo podemos imaginar a partir de objetos reales - o conocidos- ). No les interesa invadirnos. Se dirigen a otro lugar. Como mucho se puede decir que les interesan nuestras vacas, a las que mutilan sin dejar rastros. ¿Para qué?. Como buenos turistas, les habrá gustado el asado...