Vacío


Sentir que él me envolvía como bufanda, bufandas que hoy no hay, que nunca más hubo y que no puedo encontrar en este mismo y antiguo ropero...
Y esa es la razón por la cual dejo que los saxos me inunden, que las cosas me inunden, que algo me inunde aunque no me abrigue, ni me enrosque.
La inundación y el abrigo; tan opuestos, en realidad. ¿Será que uno no se anima a dejarse envolver por una tibia y mullida bufanda otra vez, entonces busca que el agua fría le llegue hasta el cuello?

Hay cosas tan básicas como cerrar los ojos, que nunca me acuerdo de hacer.
Mi adentro, ¡¿dónde está?!.O.O. Lo perdí de vista...
Solía tener todas las instrucciones, los códigos, los mapas, veía los árboles universales como parámetros y también veía cabañas de abuelitos que regalaban pastillas de colores a nosotros, los niños perdidos, que aunque perdidos y todo sabíamos a dónde queríamos llegar.

¿cómo puede ser que todo termine encasillado en la palabra “crisis”? Entonces la vida en sí es una crisis.

A veces soy una flor que se deshoja en medio de un ejército de amapolas.
A veces no. Pero casi siempre sí. 
Tiene que ver con todo un estilo ser una flor que se deshoja en medio de un ejército de amapolas. No cualquiera "nace" con un estilo que no puede sacarse de encima y que ni siquiera puede definir. Llega un momento de la vida en que te das cuenta que casi nadie piensa en estas cosas, que casi nadie tiene el estilo amapola, y que son muy felices... y un@ es un@ idiota atravesad@ por un orificio imposible de llenar. Y esa es toda la diferencia entre los felices y los enroscados. Nada más que eso.

Muddy Waters, un gran tipo.

Sonrisa negra y rota
Beso de marfil y babosa erótica





Comentarios

Publicar un comentario