Amanda Mandarina






...Amanda Mandarina despierta en una cama mojada de sudor y lagrimas. Se levanta, mira por la ventana, ve la playa, el mar y el atardecer. Prende un cigarrillo. Baja por la escalera hacia la playa. Encuentra un pez fuera del agua. Lo empuja hacia el mar.
Hace mucho que vagabundea, vive en una distracción constante, es torpe pero tiene una especie de Magia que la salva a último momento. Una magia que no sabe si nace de si misma o viene de algún dios o de otro lugar. No puede entender mucho nada. Pero camina por el mundo y por su vida como caminaba ese día por esa playa. No tiene amigos. Ni malas intenciones. Actúa por impulso. Ha olvidado casi todo su pasado, y le falta fuerza en el cuerpo. Es pálida.

En una época vivió en un circo, alimentando a los animales y haciendo trapesismo.
El tiempo fue pasando, el dueño del circo le exigía más, y se escapó una noche de luna sonriente (todo lo contrario al oso de Moris). Corrió y caminó durante horas con su mochila pesada. Llegó hasta un río y habló con él. Alguien la vió y creyó que estaba loca, no se imaginaban que Amanda Mandarina tenía conexión con la Magia, esa magia que ahora ya no conversa con ella sino que sólo la salva a último momento. Este alguien la llevó a un manicomio, en donde estuvo unos meses resistiendo hasta que finalmente la convencieron de que estaba loca. Se sintió insegura de si misma y no se animó a escapar. No tardó mucho tiempo en escapar igual…(es una experta en escapes. Nunca soportó mucho la autoridad de nadie.) A esta altura estaba debilitada de tantas pastillas y cosas químicas que le daban en el internado para que no se aburriera y no se fuera de allí asi que caminó con su mochila más pesada que antes, encontró una ruta y se puso a hacer dedo. Subió a un auto que la llevó hasta el fin del mundo en una noche, y se enamoró del hombre de porcelana que lo manejaba. Era tan frágil el hombre que no duró mucho tiempo en romperse, se tropezó una tarde de asado y vino tinto con una piedra. Por suerte, el hombre le había enseñado a manejar. Lo dejó muerto ahí, al lado de la parrilla, derritiéndose a fuego lento.
A Amanda Mandarina le habían hecho creer que la Magia era producto de su imaginación, la confundieron mucho con eso. Se deprimió, sintió que si la magia no existía ella no era quien había creído ser y que un 80 por ciento de su vida era una mentira. Por mas que brillara el sol, ella no estaba contenta casi nunca…y casi no hablaba porque no creía mas en sus amigos de la Magia y no tenía otros.
Amanda Mandarina no cree en casi nada. Y se aburre por eso. Ha vagabundeado por tantas historietas que no las voy a escribir.
Ahora está en la playa, caminando, mirando un punto fijo, ya apagó su cigarrillo.
Sabe una gran verdad, pero es la verdad más triste de todas: no existe nada que sea verdadero. Todo es interpretación, y ni siquiera uno interpreta de X manera y no de otra por alguna razón concreta , pues no existen razones concretas, sino por azar o por casualidad. Las razones o causas también son azarosas, múltiples, con muchas caras como las verdades. Y una verdad para ser verdad necesita de una concreción, una cierta estabilidad. Uno le da concreción a las cosas, a los sentimientos de uno mismo y de los demás, a la realidad, al mundo, con la interpretación.

El tema es la desilusión. Por lo general la gente cree que sus formas que atrapan contenido existen fuera de si mismas y que por ende forma y contenido son cosas verdaderas y concretas, y las personas entonces se sienten muy a gusto con la realidad, como insertados en ella. Y cuando uno descubre que no es así, te sobreviene de golpe una profunda soledad. Una terrible angustia. Eso es lo que hay en sus ojos perdidos, se siente perdida pero no mas que el resto de la humanidad.
Ahora bien, como para todo hay infinitas posibilidades (invisibles, ocurridas y no ocurridas, etc.), para vivir partiendo de esta idea problemática existen muchísimas actitudes:
A ella sólo se le ocurren dos:
Vivir triste, perdida en el devenir inatrapable de la realidad, o las realidades o como más os guste, sin encontrarle sentido a nada, que es lo mismo que decir: no darle ninguna forma al gran contenido infinito de la existencia, (tirar la toalla, mandar todo a la mierda, total nada es “en serio”).O bien, dar forma igual al y los contenidos, y pasarla lo mejor posible en este mundo.
La primera opción es caer en una depresión, es preferible pegarse un tiro a vivir sin sentido, sin ganas, aburrido y angustiado eternamente (dentro de la escasa eternidad de un hombre).
La segunda es muy positiva, dentro de todo, pero a un alma acostumbrada a vivir partiendo de ciertas bases existenciales, que ha construido su realidad sobre esas bases que de pronto descubre que no son verdades, es muy difícil que no sienta que se desmorona la construcción de su mundo. Es como hacer una casa sobre un piso, pero de pronto ver que el piso en realidad no existe (o mejor dicho esta ahí pero podría desparecer), que no es tan fuerte, tan seguro y que lo que se ha construido sobre él pesa lo que pesa una creencia, es decir la creencia de que podía sostener una realidad para siempre…. Entonces aparece el vértigo, ese piso puede desaparecer en cualquier momento, todo lo construido sobre él se derrumbará. ¿Que hacer?! :O
En eso estaba Amanda Mandarina, fumando su eterno cigarrillo. Esta vez no podía escapar. Ni queria matarse. Pero sufría ese vértigo angustioso y que parece no tener remedio. (Y es que en realidad no lo tiene, lo que uno puede remediar son sus formas de atrapar contenido y si el piso se derrumba tener a mano otro piso donde pararse, ya que los humanos no volamos).

Amanda Mandarina podía volar, pero ya no lo hace porque tiene vértigo. Aceptar esta única verdad (que también es una interpretación de la realidad, porque no existen verdades) es hacerse responsable de uno mismo y del mundo. El mundo es como es, pero podría ser de otras maneras, no es algo estático, no hay nada estático, solo nuestras formas que son estáticas mientras no decidamos cambiarlas…Lo único estático está en el hombre, y ni siquiera en su naturaleza, sino en su creencia de lo estático. Amanda Mandarina ve correr el río de palabras de su pensamiento, buscando la idea salvadora que sostendrá sus pies y no la dejará caer.

Se hizo de noche, piensa establecerse en algún lugar por algún tiempo, esta cansada de andar de acá para allá con su palidez, su inseguridad, su mochila pesada. Quiere inventar su frágil estabilidad (frágil no porque sea suya, sino porque cualquier estabilidad es frágil e inventada).

Está sentada sobre un puente con los pies colgando. Un chico se sienta a su lado y le habla. Ella permanece callada y lo mira un rato, otro rato mira como siempre hacia el infinito y se pierden sus ojos. El chico la abraza. La luna estaba sonriente -"como para salir corriendo"- piensa Amanda Mandarina en su primera tentación de escapar. Pero se aguanta y sabe que una vez pasada la primera tentación, ya no tiene otras tentaciones de esa índole. Se queda con él escuchando una voz humana y diferente a la de ella. Se duerme en sus brazos.

El chico se fue y a veces vuelve para estar con ella, mientras no se alejen sus ojos de esta dimensión y se vaya volando como suele hacer. Desaparece tan naturalmente…que hay veces en que Fulanito se asusta...

Comentarios

  1. hermoso escrito y bastante triste pero totalmente real.. generalmente escribimos para sacarnos cosas ,, a mi me pasa siempre cuando estoy mal .. o sea casi siempre jaja .. un abrazo ire ,, y ke tengas suerte ..

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  2. Holas, vengo de parte del hombre de porselana... o era el hermano no me acuerdo, a pedirte devuelta el auto... jeje... bueno no viene al caso vengo a decirle a amanda q la maia sigue estando, que solo siga creyengo, y q con eso va a poder sobreyevar las no verdades, q no dude de eso, a mi tmb me metiron al ospicio, por reirme solo de los chistes q me hacia mis otros yos, me convencieron de q solo era 1 pero me costaba ignorar las charlas q me hacia... asi q tmb me escape, mate al doctor con una palabra punso cortante y me fui, escondido en la sombra de una carabana de circo, me escondi entre los animales camuflandome con uno de mis yoes y nadie me vio. te estube buscando por un largo tiempo, el hombre de la ametrayadora era un yo del inconciente, disculpa si te asusto (jejeje)... pero siempre estas desapareciendo... bueno, nada, te pasaba a saludar para decirte q en el vacio infinito podes planear y disfrutar del viento fresco d la cahida. y el q se desmorone un piso no quiere decir el vacio eterno, sino el reto de construir otro...


    bueno amanda, decime dnd esta el auto asi lo vendo y ns compramos una birras...

    ViruX37

    Psd: Lo vi a Fulanito... te invita un asado para el domingo, anda y de paso me cuelo XD


    Adios

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  3. :)
    me gustan las formas que me cuentan tus palabras..

    besos de colores! o si te gustan más: en blanco y negro..
    te quiero, amiga! (y a mi feliz )

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    Respuestas
    1. Recién veo este comentario! a esto lo publiqué en el 2009 pero lo escribí en el 2006 (?) ( ja! no sé porqué pero tenía que aclararlo). Besos, Ju!

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